Las TIC en el
entorno educativo
Reflexiones para el curso “La Web 2.0”
“Las TIC ya están
entre nosotros”. Este podría ser el titular de un diario o una revista que
plantea la existencia y cercanía del ente desconocido. ¿Y qué tan desconocido
es realmente? Las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) han
estado a nuestro alrededor hace ya varios años. La radio como vehículo de la
información. Luego la televisión. Los medios impresos aún competían en esos
tiempos lejanos. Luego la telefonía móvil, el internet, las redes sociales… En
fin. Las TIC ya estaban entre nosotros.
Pero hoy día se
suscita una nueva variante. Dado que la tecnología nos rodea, nos absorbe, nos
vuelve adictos a ella, ¿cómo podemos incluirla en nuestra vida cotidiana? ¿A
través de la educación quizás? ¡Por qué no! Pero, ¿cómo logramos introducir un
concepto tan reciente dentro de una institución tan antigua y jerárquica?
Ken Robinson explicaba
en una charla en 2010 que, ante estos avances tecnológicos que florecen día a
día, la educación debería reinventarse. ¿Debemos seguir con los antiguos dogmas
de la educación, planteados para una sociedad industrial? ¿Debemos inculcar un
saber preestablecido donde se evalúa lo “correcto” del aprendizaje? ¿Debemos
destruir lo antiguo y comenzar a formular lo nuevo incluyendo los saberes
actuales?
Creo que, ante todo,
la moderación debe prevalecer en estas nuevas épocas. Destruir lo antiguo solo
significaría una reconstrucción sin parámetros, lo que indudablemente llevará a
mayores problemas de los que podría resolver. Una idea que ronda al concepto de
reinvención de la educación es la construcción de nuevos espacios que se
adapten a los preexistentes pero que brinden más posibilidades de expansión en
las áreas tecnológicas. Pero para esto también es necesaria (sino
indispensable) la apropiación de las tecnologías por parte de aquellos
encargados de la educación. Pero no planteo esto como algo dogmático que
mantenga el statu quo de la jerarquía institucional. Ya se ha hablado mucho sobre
la brecha digital generacional existente entre los alumnos y los docentes. Y
por esta razón es imprescindible que el docente se apropie también de esta
tecnología. Y para alcanzar esta meta debe formarse.
¿Qué sucedería si los
docentes no se apropian de las nuevas tecnologías? En primer término, no las
utilizarían. ¿Para qué usar algo que desconozco y no encuentro una función para
él? Entonces sucedería algo similar a lo ocurrido en el video presentado en el
eje anterior “Tecnologías e Metodologías”. Sin apropiación de la tecnología es
imposible pretender un cambio metodológico. En segundo término las rechazarían.
Me imagino que los primeros hombres que se toparon por primera vez con el fuego
no lo habrían manipulado como algo usual y cotidiano. EL temor es natural, y
junto al temor viene el rechazo. Por último el docente vería a la tecnología
como una amenaza a su sistema pedagógico. “Los chicos se pasan todo el día
jugando juegos en red” es una verdad que a pocos les parecerá ajena. Y ¿qué
hacer al respecto? ¿Sancionar? ¿Sustraer las computadoras? Pero, ¿por qué los
chicos en clase juegan juegos en red?
Como verán, a mi
entender este asunto es my complejo y con mucha “leña para debate”. No es mi
intención acusar a los docentes del hecho que los chicos jueguen en red en la
escuela. La realidad es que nadie ha puesto límites a la utilización de las
tecnologías en los chicos. ¿Por qué un padre llama al celular de su hijo en
horario en que sabe que está en clases? Ese padre, ¿está siendo irresponsable?
¿Quién educa, entonces, a los chicos en cuanto a la utilización de las
tecnologías? Creo que el primero que debe ser formado es el docente. Luego
formaremos a los alumnos. A pesar de que este pensamiento mantenga la verticalidad
estructural y jerárquica de las escuelas como instituciones. Creo que aun somos
muy “jóvenes” para pretender una enseñanza horizontal, con intercambios entre
el docente y el alumno.
Dr. Gabriel Russo
Biólogo
Gabriel!!!! Muy interesante reflexión e interrogantes planteados!
ResponderEliminarEs cierto, quizás estamos en los albores de cambios mas grandes y profundos que impactarán en las generaciones venideras.
Me resultó muy interesante lo que has planteado respecto de la institución educativa en cuanto a la necesidad de "aggiornarse" al contexto. Es por eso que muchas veces se plantea que los consumos de los más pequeños sean retomados e incluidos en las practicas de enseñanza como una manera de incluirlos en dicho proceso, hacerlos sujetos activos y partícipes y que el docente no sea el "depositario del saber". Es imprescindible una participación activa de los docentes al interior de la institución educativa con el fin de formar consumidores críticos de las tecnologías enriqueciendo las capacidades simbolicas de los mismos!
Sigo recorriendo el espacio...
Marianela.-